martes, 31 de mayo de 2011

No todo era lo que parecía


Sentado en mi punto de equilibrio

He visto apagarse estrellas, y colapsar /

He visto nacer el tiempo, y agotarse las opciones /

Perdí la fe en el devenir aleatorio.

Desde aquí, sin perturbaciones ondulatorias,

He asistido a la creación de mundos insustanciales,

Y a otras fusiones sin música de fondo.

En mi punto en medio del vacío, incluso divisé

Una vez /

Una singularidad desnuda

En medio de su nada y de mi todo.

Expuesta en el plano, huyendo de la energía negativa,

Me derritió cuando recibí su luz de vuelta…

Una fuga / sin censura / cósmica.



lunes, 30 de mayo de 2011

Moncayo al atardecer

Por fin volvemos a intentar el Moncayo. El mal tiempo del año anterior nos frenó después de toda la subida, cuando simplemente quedaba crestear. No es una montaña alta, ni difícil. No tiene un interés especial, pero desde luego, si hay algo que joroba…es que gane Ella. El frío y la niebla nos hicieron darnos la vuelta hace un año…éste, ni la tormenta final lo podría conseguir.

Salimos de Madrid antes de comer, y llegamos al aparcamiento del Santuario a las 17.00h. Empezamos a andar entre la niebla (sí, como gorilas en la idem), atravesando la primera parte de la montaña, el bosque. Ahí iba yo primero, pero cuando salimos a la parte “desnuda”, Miguel se puso delante. Y mejor, que tras tanto tiempo sin ir al monte, estaba yo para protagonizar la escapada del día…

Una vez que salimos del bosque, la niebla quedó por debajo de nosotros, con lo que teníamos unas vistas sobre el mar de nubes, realmente preciosas. Ni que decir de la montaña. Por primera vez veía la cima, antaño siempre cubierta. Por primera vez veía el cortado tan escarpado que hay justo debajo de ella, y por el que todos los años el Moncayo sale en la sección Sucesos. Una pendiente de tierra de unos 80 grados, es suficiente para que si hay niebla, la gente se desvíe del camino y, simplemente, caiga.

Nuestra vía va por la izquierda de todo eso, también escarpada, pero haciendo eses tranquilamente. En 1h30min llegamos a la cima. Podría haber sido mejor si no hubiera estado yo tan lento, diga Miguel lo que diga. Fotos, paz, comida, agua…

De hecho llegué un poco deshidratado, porque pensé que no tenía la cantimplora, y por no jorobar a Miguel (y por no cogerle, que iba 30 m por delante…), pues no bebí nada.

Cuando tienes la montaña para ti solo, es una sensación casi insuperable. Tras un rato, emprendimos la vuelta. Sin contratiempos, a las 20.00h estábamos en el coche de nuevo, deseando llegar al hotel a Tarazona para ducharnos y cervecear a gusto. A fin de cuentas, para qué se sube una montaña? Para no tener remordimientos cuando te pimples a cerveza y gintonic después. Y, por una vez, escogimos el orden adecuado: primero montaña, luego cerveza. No siempre tomamos la decisión correcta.

Una cosa pendiente menos. Nos quedan Bisaurín, que nos ha ganado dos veces por elegir el orden erróneo; y el Almanzor, que pasó lo mismo pero por motivos naturales ajenos a nosotros.

La mañana siguiente, antes de las 9.00 pude ver el Moncayo despejado por primera vez. No lo había visto entero nunca. Es la cara por la que se sube.

Diferencias de Perspectiva

Debo tener un curioso punto de vista cuando un insigne escritor y afamado erudito quiere saber qué opino de algo, pero sobre todo, cómo lo opino. Me siento como un escritor famoso…famoso al menos por decir cosas raras. Porque empleo la Física como lenguaje. No debería resultar tan extraño, ya que la Física es la Ciencia que estudia la Naturaleza, su comportamiento. ¿Qué hay más dentro de la Naturaleza que la vida, los sentimientos, las relaciones humanas?

En este caso, veamos las diferencias de perspectiva. Una chica. Un chico. Ambos están en un café, conversando. Están rodeados de gente, son un conjunto de individualidades, y cada uno, como animal social, se forma una opinión sobre el resto de individualidades. Ella tiene otra vida, sin Él. Él sólo tiene una vida, Ella. Analicemos la situación desde 3 sistemas de referencia.

La pareja es un sistema visto desde fuera. Los demás, no saben nada de esa pareja que conversa, pero desde luego, desde sus mesas, desde sus perspectivas, son vistos como un conjunto. Evidentemente, se pertenecen, cada uno está incluido en el conjunto del otro. No se plantean otra opción. Saben su vida, o son capaces de deducirla partiendo de una premisa que no saben, pero que deducen. Y no se equivocan durante ese intervalo de tiempo, tienen una velocidad infinita, se someten a la relatividad. Desde fuera, el tiempo lleva un ritmo. Desde dentro, otro. Cuando se bajan de la mesa “espacial”, ha pasado un tiempo t1, mientras que para la pareja, ha sido un t2 > t1. Es decir, salen del bar más jóvenes de lo que entraron. Es la paradoja de los adúlteros…perdón, de los gemelos.

Sin embargo, ¿qué pasa empleando otro sistema de referencia? Él, ve un conjunto disjunto de individualidades, pero en realidad querría ser más junto que disjunto. Es un planeta orbitando entorno a su estrella. Está ligado a Ella, pero nunca podrán ser un sistema Doble. Él, un satélite; Ella…Ella una estrella. Sólo serán una misma cosa cuando la estrella, moribunda explote y engulla todo lo que está en sus cercanías. Mientras, Él soñará con violar alguna ley y salir de la órbita para caer hacia Ella.

La chica es una estrella caliente, viva, con varios satélites orbitando en su espacio. Todos igual de importantes, todos ligados a Ella. Todos sin poder tener un centro de rotación común. En el bar, hay un instante de sincronía. Un instante finito. La vida de Ella se muestra como conjunto infinito de instantes finitos. La Estrella se desplaza por el Universo sin inmutarse, arrastrando toda la materia a su paso.

Vistos las tres perspectivas, ¿puede decirse que haya alguna cierta? ¿puede decirse que haya alguna falsa? No. Todos tienen razón. Al menos hay un instante finito de tiempo en el que el observador imparcial, el planeta dependiente y la estrella centro del Universo manejan coordenadas que no dependen del sistema de referencia. Hay al menos un instante finito en el que la vida tiene simetría, sincronía. En la que la vida tiene sentido. Ya lo dice Mark Knopfler:

Where do you think you’re going

Don’t you know it’s dark outside

Menos mal que lo que la Física dice de manera enrevesada, Mark Knopfler lo hace sencillo.

Podemos esforzarnos en cambiar la realidad. O podemos dar el valor concreto que cada instante o intervalo de tiempo tiene en nuestro sistema de referencia. Podemos quedarnos con la visión del observador externo, o con la de la Estrella. O con la nuestra. Quizá, sea más inteligente hacer un HDR y componer las tres fotografías para hacer una que resalte cada detalle. Sería una bonita imagen. Sólo hay que saber manejar programas de retoque fotográfico…




jueves, 26 de mayo de 2011

Hasta el infinito...¿y más allá?


No me he convertido en Buzz Lightyear...

Ayer, debatiendo sobre la felicidad y la infelicidad (con vino y gintonic claro...) mi amigo Jon me dio un punto de vista que a mí no se me había ocurrido. Está claro, él es Físico: "entiendo que estés triste, tu vida tiene muchas cosas, pero es una suma finita de cosas finitas. Eso no colma el ansia infinita que tu corazón necesita".

Qué cabrón, me hizo pensar, y a Ame también.

Bien, cierto es que si cogemos todas las partes de nuestra vida y las hacemos del tipo:

MATH

está claro que nunca colmaremos unas expectativas infinitas. Si todo se reduce a una fría suma con un límite, por más cosas que añadamos, nunca alcanzaremos el infinito. Podemos hacer, por el método de aproximaciones sucesivas, un acercamiento tan bueno como queramos, pero sin llegar a tocarlo. Sería pues, infinitesimal.

J dice que la diferencia entre la parte finita de nuestra vida y la necesidad infinita, ha de llenarse de alguna manera, que es precisamente en lo que radica la felicidad. No sé qué le parecería esta teoría a Bertrand Russell, ya que se molestó en escribir todo un libro para conquistarla. J sabe cómo llena esa diferencia infinita, cómo dar ese paso, pero es algo tan íntimo, que no vale más que para él. El problema, visto como él lo ve, no tiene solución en un mundo como el mío. Con lo que tendré que replantear la cuestión.

La única manera de llegar a un infinito mediante suma de cosas, es si conseguimos sumar cosas infinitas. Pero si es difícil encontrar una sólo, ni te cuento varias. Vamos a pensar un poco.

¿Y si, en lugar de considerar las partes de mi vida como suma finita de cosas finitas, vamos más allá y suponemos que los valores son infinitos? Si la amistad, o la inteligencia, o amores...los considero infinitos porque son tan grandes como yo quiero, quizá el problema tendría una solución.

Entonces me pregunto, si ya he encontrado lo infinito que pueda colmar un ansia desmedida, ¿por qué no vale?

Puede que sea necesario un cambio de coordenadas...Si tengo un cerebro cartesiano, ¿qué coordenadas elijo? No me veo en esféricas, ni en polares. Quién me iba a decir a mí, con la manía que cogí a Mecánica y Ondas de Segundo, que igual la elección de las coordenadas generalizadas podía salvarme la vida...Sí, ésas que son independientes del sistema de referencia!!

EUREKA

PD - ¿Y cómo se consigue esto?

Admito sugerencias con base científica...

Universos Paralelos en la Medianoche de París



Suenan las campanas por la medianoche. Ves aparecer un coche algo antiguo, pero bueno, siempre hay alguien que tiene uno así. Menos normal es que, sin conocerte de nada, sus ocupantes te inviten a entrar y a ir a una fiesta. Una fiesta de disfraces, dices para tus adentros…desentonaré un poco, pero ya nos apañaremos. Total, he bebido bastante vino, algo se me ocurrirá. Al rato, tras encontrarte en la fiesta con personajes que sabes que conoces, pero que no son coetáneos tuyos, empiezas a pensar: amigo, aquí hay algo raro.

¿Qué probabilidades hay de que aparezca un coche justo con el tipo de gente que tú querías encontrarte, y que te lleven justo al mundo en el que tú querrías vivir? ¿Cómo es posible que sin experimentar ningún tipo de salto, de vacío, de aceleración atraviese el espacio-tiempo hacia atrás? ¿Por qué todo el mundo aparece en su mundo como eran, y yo irrumpo en él tal como soy en el mío? ¿No debería haberme cambiado algo?

Vamos a olvidarnos de las probabilidades del coche y de la gente que iba dentro. Dejemos el tema en que si deseas algo fuertemente, aunque sea de manera inconsciente haces todo lo posible por tenerlo o conseguirlo. Despreciemos la variable “coño, que son de hace 90 años”. Importa el concepto: uno tiene lo que intenta conseguir. Al menos, con mayor facilidad que lo que no intenta. No existe la casualidad, sino la causalidad.

Vayamos directamente a como Woody Allen aparece junto a Cole Porter, con el único cambio de aparecer en forma de Owen Wilson. Nimiedades. Además, la historia ya empezó así, con lo que no es consecuencia del viaje. Pensemos en el concepto de tiempo, para saber si es posible desplazarse a su antojo por él. Para empezar, el tiempo no existe como tal. Es un cuarteto, no de cuerda, aunque sí con cuerdas (perdón por el chiste excesivamente freak), en el que aparece ligado indisolublemente a las 3 dimensiones espaciales. Sí, ya sé que hay más, pero están enrolladas y no me ayudan nada en la explicación. Al menos por ahora. Son 3D más el tiempo. Esta cosa enrevesada se la debemos a un tipo muy majete, Minkowski. Por otro lado, este conjunto espaciotemporal, no existe sin más, sino que se va creando conforme el Universo se expande. Desde mi punto de vista, no podríamos ya viajar al futuro porque el conjunto espaciotemporal no existe aún. Pero eso es otro tema, que igual se solucionaba con los Universos paralelos. Vayamos al pasado, que es más sencillo. Bien, uno piensa “genial, al pasado vamos”. Pero, ¿qué implica esto? Intervienen conceptos como Energía, Entropía, Expansión, Corrimiento al Rojo, Universos Paralelos…

La Entropía, como he descrito en anteriores posts, es una cosa intangible que te dice el grado de desorden de nuestro Universo (en particular). La Termodinámica dice que la entropía de un sistema siempre aumenta como resultado global de los procesos que en él se producen. Es decir, el espacio-tiempo va íntimamente ligado a esto, produciendo la flecha de evolución temporal conforme el Universo se expande. En resumen, avanzar en el tiempo (al ritmo normal) hace que la entropía aumente. ¿Cómo rompemos este concepto de aumento, si para volver atrás hay que violar un principio fundamental? No podemos, salvo que consideremos los Universos paralelos, y aún así, tengo mis dudas. Podemos suponer que el conjunto de Universos que tenemos son como hojas de lasaña onduladas, flotando en una olla con agua caliente. Cada lasaña es un Universo completito, con sus planetas en sus galaxias, sus agujeros negros y demás cosillas cósmicas. En el Sistema Solar pertinente, con la oportuna Tierra y sus habitantes, estamos nosotros. Nuestro tiempo y nuestro espacio. Yo, voy a aventurarme a suponer que el pasado se almacena, y queda registrado en otra lasaña flotante en la olla. Un salto entre placas de lasaña quizá deje tranquila la entropía, ya que pasamos de un sistema a otro mediante una singularidad (sí, donde no pueden aplicarse las leyes conocidas). Es decir, el coche. Suponemos que el coche es nuestra singularidad (en nuestra olla, tiene que ser un tenedor), y conseguimos alcanzar el Universo en el que se almacena el pasado concreto que queremos. Ahí tenemos a Cole Porter y, sobre todo, a Marion Cotillard. ¿No merece la pena aventurarse a saltar de Universo si podemos sentarnos en un banco, en silencio, y que Ella se apoye en tu hombro cerrando los ojos?Puede que las singularidades y todas las suposiciones en que la Física se basa, al fin, merezcan la pena, y tengamos algo tangible en nuestros brazos. Quizá los sueños, antaño tan alejados de la Física real, tengan un punto en común. No hay más que suponer algo medianamente cierto y saltar de Universo. Yo elijo el de Adriana (Marion). ¿Tú?

Cierra los ojos, y agarra tu singularidad. Quizá falles, y no consigas quedarte en el Universo paralelo con el tiempo pasado. ¿Y si, cuando vuelves a tu placa de lasaña, Ella, saltó al Universo moderno convertida en vendedora de nostalgia? Ya, cómo va a imaginar algo que su cerebro no tiene almacenado…

Quizá ahí resida su singularidad.



PD. Aquí,la versión Oficial, de JP:

http://ulises26.blogspot.com/2011/05/almacen-de-la-tienda-de-la-nostalgia.html

Las dos caras de la realidad



miércoles, 25 de mayo de 2011

A vueltas con Heisenberg


Dice el principio de incertidumbre de Heisenberg, asi en versión light, que no puedes conocer con exactitud la posición y la velocidad de una partícula en un momento determinado. Sólo puedes saber una de las dos variables, y cuanto más exacto eres en una, tanto más desconoces de la otra. El objetivo es, por tanto, encontrar un equilibrio entre ambas magnitudes para intentar conocer lo máximo posible de tu partícula. Acaba pues reducido a un problema de probabilidades, y trataremos de que haya más probabilidad de que la partícula se encuentre por aquí y que vaya a tal velocidad.
En definitiva, uno no puede saberlo todo de todo, porque el mero hecho de intentar medir, altera el sistema que analiza. Si quieres saber algo sobre alguien, tienes que indagar, preguntar. Y eso altera el medio. Siempre tendremos una incertidumbre razonable alrededor de lo que queramos saber.
Una chica. Tú. Frente a frente. Y en ese momento, decides sacar tu maravillosa colección de teoremas, axiomas, leyes y demás cosas imprescindibles para manejarte en la vida. Piensas en Heisemberg, y analizas la incertidumbre del momento, porque claro, no puedes saber dónde está esa chica con precisión infinitesimal, y si da un paso, tampoco puedes saber exactamente hacia dónde va. Tú te confías, y dices: coño, está ahí delante y viene hacia mí...nonono, no te dejes manipular, las leyes de la Física existen por algo. Gente más inteligente que tú las puso ahí...Reflexiona.
Tras calmarte, porque Heisenberg está de tu lado, empiezas a pensar en la expansión del Universo. No puede estar acercándose...violaría la segunda ley de la termodinámica!! Quién se cree esta chica para decidir que la entropía disminuye!! Venga hombre. Siempre aumenta...así que mira, ya sabes algo, se está alejando...que no te engañen los ojos, el espectro visible es ínfimo, quién sabe qué pasa en IR o rayos Gamma...
Media hora después, después de hacer tus ecuaciones, levantas la cabeza y estás solo en mitad de la calle. Te felicitas a ti mismo por haberte dado cuenta de que ella se alejaba, que lo otro era una ilusión óptica. Menos mal que los sabios estaban de tu parte amigo.

Emprendes el camino a casa orgulloso, sin haberte percatado de que lo que tenías delante, no era sino una singularidad, ésa en la que las leyes de la Física no saben cómo responder, ésa en que sólo vale cerrar los ojos y colisionar y así, dejar la incertidumbre para la hora del desayuno y no sepas si poner Ride Across The River o The Ties That Bind en tu tocadiscos.

Me gustaría poder abrazarte

Y así, sin más,

Echar el tiempo que nos queda.

Sin pretensiones, ni post-tensiones.


Que suene la guitarra...

martes, 24 de mayo de 2011

Quizá se acabó el alpinismo...


http://desnivel.com/expediciones/rescate-en-el-lhotse-habra-que-reflexionar-sobre-este-alpinismo-al-limite


Así de duro suena, pero tras comprobar los últimos delirios de grandeza de nuestros antaño alpinistas, uno no sabe qué pensar. En un país en el que hay tanta cantidad, al final tiene que bajar la calidad. No puede ser de otra manera.
Alpinismo, aventura, riesgo, desafío, innovación...eran términos comunes, que ya no tienen nada que ver. El Everest es un circo, el Lhotse también. Así casi cada gran montaña. En breve van a cambiar la definición de montaña, de hecho, vendrá Hugh Grant en persona. Ahora, o tienes 8mil metros, o eres una colinucha de na.
No importa que se ascienda con 15 sherpas por persona, con tienda de camapaña con calefacción, oxígeno por arrobas, cuerdas fijas hasta la cumbre...sólo falta el chiringuito de Mahou en la cumbre!! Creo que alguno de estos que ahora se llaman alpinistas, barajará poner un bar en la cima del Everest.
Acualmente, el alpinismo se reduce a batir récords, sea como sea. No se valora la hazaña porque está casi todo hecho. El caso es ser el más viejo, o el más cojo, o el más moreno, o el más alto o el más tonto en subir. No quedan casi expediciones que merezcan tal calificativo. Antaño, cuando Carlos Soria participó en la primera a un 8mil española, las cosas eran de otra manera. El viaje en sí era una incógnita. Era aventura pura y dura. Unos hombres, una montaña. Frente a frente. O ganas tú, o ganamos nosotros.
Ahora hay gente que, apoyados por las instituciones, arriesgan la vida del resto, pues la suya poco importa realmente. Pero aquellos que se juegan el pellejo por sacarles de una muerte segura, montaña tras montaña...quedan en un tercer plano. Una planificación, para ciertos "expedicionarios" españoles consiste en subir la montaña. Bajar...bueno, ya veremos cómo coño bajamos, pero subir, por mis cojones que subo...Eso deben pensar algunos. Casualmente los que pueden pagarse un helicóptero cada vez que sus fuerzas les abandonan a 7000 m de altura. O que tienen congelaciones, o que se pierden sistemáticamente. ¿Cómo un tío que ha subido 23 8miles, falla en la planificación de una ascensión y llega tan tarde a la cima que en la bajada está a punto de morir 13 veces?

Y así 8mil tras 8 mil. ¿Cuántos llevan realmente Pauner y Oiarzábal? Divide por la mitad, porque mientras no pisen por sus propios medios el Campo Base, la montaña no está hecha. Hasta entonces, sigues perteneciéndole. Si en las últimas 3 expediciones han tenido que rescatarte...¿no crees que es el momento de dedicarte a jugar al mus con los amigos?

Mientras haya gente que vea a estas personas como héroes, seguirán encontrando dinero para hacer el ridículo ante el mundo. Pero claro, están seguros allá arriba, porque siempre encuentran un Horia, un Benegas, un Steck que lo deje todo para ir por ellos. Y ahora que Simone Moro tiene helicóptero...aún más.

¿Cuántos de nuestros afamados y comerciales héroes, arriesgarían su vida por el que llevan atado a la cintura? ¿Cuántos se cambiarían de valle y abandonarían su proyecto por intentar rescatar a un amigo en peligro? Sólo 3 o 4 personas en el mundo harían eso, y, lamentablemente, no son españoles. Aunque siempre tengan que rescatar a los "nuestros".

Por contra, los que realmente son alpinistas, no aparecen más que en comentarios de columna lateral, eso si tienen suerte. Ánimo a gente inmensa como Carlos Soria, Egocheaga, Iñurrategi y compañía. EnEspaña tenemos tanto, que incluso algunos son buenos.

Yo sé quiénes son los míos, tengan el pasaporte que tengan. Incluso la heroicidad está devaluda, tiempos aciagos...

Nos despojamos de aquello que nos sobra


http://www.elpais.com/articulo/sociedad/Chorros/particulas/partir/agujero/negro/elpepusoccie/20110523elpepusoc_7/Tes


Cuando yo estudiaba...perdón, cuando iba a clase, se decía que cuando un cuerpo se acercaba al horizonte de sucesos, se desfragmentaba en los elementos más pequeños posibles, siendo unos fagocitados por el agujero negro, y otros expulsados violentamente en dirección contraria.

Si lo trasladamos a nuestra pequeña realidad, es como si en un cuarto aislado te acercas a una chica, todos observando con potentes gafas, lentillas y demás artilugios de visión cercana. Vas perdiendo capas que arrojas tan lejos como puedas, con el único objetivo de caer en la singularidad.

A quién le importa que no se sepa qué ocurre ahí dentro. Es suyo. Y tuyo.

lunes, 23 de mayo de 2011

Remanente de Supernova


Cuando muere una estrella, nace otra nueva

La cuestión es, pequeña, quién muere de los dos….

Si tu juvenil verbigracia

O mi senil demencia.

Acostados en el horizonte de sucesos,

Hemos de decidir si nos despojamos

De nuestras capas exteriores, siendo desnaturalizados /

o cerramos los ojos, abrazados,

para ser un sistema doble entre todas las individualidades.

Planetas Exteriores


Una vez que el desorden neuronal se da por bueno, ¿qué nos queda?

Como decía el otro día, la Ciencia tiene respuestas para todo, y para todos. No se trata de rigor, claro, pero sí nos da unos esbozos, o ejemplos. He aquí lo que pienso en general, o lo que pueda pensar en particular. Uno de los problemas más extendidos, es el acercamiento entre dos (muchas suerte hay que tener para que sean más de dos. Eso, o ser primeros de mes...) cuerpos. La física lo arregla con un poco de masa y gravedad…pero chico, mira que como hamburguesas y mi gravedad no aumenta. Al menos no consigo que un cuerpo (o cuerpazo) que pase por mi órbita se vea irremediablemente atrapado por mi magnetismo (temporalmente no obstante)…¿¿Necesitaré ligar con Afrodita A?? Pechos fuera!!!!!!

Yo lo veo de la siguiente manera:


Cuando eres capaz de echar la vista

Atrás, puedes sentir el peso del tiempo.

A veces, la edad te hacer perder la costumbre,

La costumbre de muchas cosas triviales

Como ver el cielo, o vitales, como contemplarlo.

La Gran Explosión se ríe de tu tiempo /

Lo inventa.

Se ríe de tu espacio / lo crea a cada paso

Para que tus lágrimas no estén sin referencia.

Siempre podrás encontrar un sistema

En el que nada importes, ni seas,

En el que no te conozca, ni me sientas,

En el que mi aire y el tuyo no se crucen

Ni tengamos que desprendernos de los electrones exteriores.

Quizá sí haya un mundo en que, despojados de muchas cosas

Podamos por fin colisionar y cerrar los ojos al vacío.




Por supuesto Sheldon Manri no estará de acuerdo con estas teorías en particular. Quizá sí en general. A fin de cuentas todo es cuestionable, por mucha ciencia que intente ponerse detrás. Aquí vuelve la entropía…Para que dos sistemas colisionen, han de acercarse, lo que en ámbitos locales puede llegar a ser correcto, pero en procesos globales...ya no. En general, los sistemas se alejan entre sí, su entropía aumenta. ¿Vuelvo pues a confiar en violar las leyes de la Física para ver si pillo? Parezco predestinado a que todo lo que quiero hacer, implique romper algo irrompible.Me siento como el físico del chiste:


¿Qué es un Físico cuántico?


La respuesta en próximas entregas.Si me apetece escribirlas

Entropía y yo


Parece obligado explicar por qué Mi Mundo Entrópico y no otra cosa igual de estúpida, ¿no?

La Entropía es un magnitud termodinámica con multitud de implicaciones, pero la que a mí me gusta y me afecta particularmente es la que se refiere al grado de desorden de un sistema. Del Universo. Del mío, claro. Así en frío es algo como:

S = k \cdot \ln \Omega

¿Cómo trasladar esto a mi mundo? Fácil, describiré las magnitudes aquí expuestas con la ayuda de mi amigo Sheldon Manrique:

k es una constante, no de pesimismo necesariamente, pero puede ser una constante "gris"

Ω es el número de microestados posibles. Aquí, más bien es de macroestados: cambio de casa, nubosidad mental, replanteamientos vitales, necesidades materiales (tecnológicas evidentemente)...

S es la entropía claro.

El caso es que la ley ésta dice, en resumen, que la entropía de un sistema cualquiera tiende siempre a aumentar. Pase lo que pase.

Yo puedo recurrir a la constante pesimista y decir: "si mi mundo tiene a aumentar su desorden haga yo lo que haga...¿por qué no me voy al bar y me pido un Tanqueray?" Así al menos, no me entero del desorden, que soy muy cuadriculado y me gustan las cosas en su sitio, hombre.

También puedo hacer otra cosa, pero va en contra de mis principios de respetar las leyes de la Física....sí, soy así, y ya que existen, es cómodo tener que cumplirlas. Romperlas exige un esfuerzo muy grande...

Pero bueno, con este blog empezaré por disminuir la entropía de mi cerebro intentando ordenarlo. Aquí se me plantea otra disyuntiva: disminuir la entropía implica romper la ley termodinámica que está íntimamente ligada con la evolución temporal. Vamos, que sería volver atrás en el tiempo...

¿Será por eso que no dejo de reirme cuando oigo la palabra "teta", o no dejo de mirar el culo a las chicas, o me gusta ir a tomar copas hasta que se haga de día?

Amigos, la ciencia tiene respuestas para todo. Cuando vuestras madres, rodillo de amasar en mano os vituperen al grito de: "vaya pedo llevas majete"...responded al unísono:

"Señora, estoy luchando fuertemente contra el desorden del mundo. Esto me lleva a violar las leyes de la física y, además, a estar más equilibrado. No altere mi concentración"

No olvidéis vomitar cuando no os vea, que si no, perdéis credibilidad.

Nos veremos por aquí. O no, que total, no me voy a enterar...